Frente, sudario de perlas
sobre cristal oceánico.
Niña tus ojos son llave
de los candiles volcánicos.
sobre cristal oceánico.
Niña tus ojos son llave
de los candiles volcánicos.
Boca que sabe agua dulce
bajo un acuoso remanso.
Niña tus ojos son oda
de los torrentes más cálidos.
bajo un acuoso remanso.
Niña tus ojos son oda
de los torrentes más cálidos.
Pechos, soporte de estrellas
del cielo azul el ornato.
Niña tus ojos de mi alma
son el enérgico ánimo.
del cielo azul el ornato.
Niña tus ojos de mi alma
son el enérgico ánimo.
Vientre varado a la orilla
de los manjares más caros.
Niña tus ojos del mundo
son el edénico hálito.
de los manjares más caros.
Niña tus ojos del mundo
son el edénico hálito.
¡Ay, mi niña! De tu cuerpo
con versos pinto su trazo.
Pero por mucho que afane
no sé pintar tus ojazos.
con versos pinto su trazo.
Pero por mucho que afane
no sé pintar tus ojazos.
Estupenda
Gracias!
Me ha gustado. Y me ha evocado los poemas de «Flor nueva de romances viejos». Por ejemplo, el poema «Romance nuevamente rehecho de la fatal desenvoltura de la Cava Florinda»: «Daban al agua sus brazos, y tentada de su frío, fue la Cava la primera que desnudó sus vestidos».
Gracias por la aportación. No he tenido ocasión de leer el poema que comentas, así que intentaré hacerlo cuanto antes. Un saludo.
Increíbles ojos…
Saludos
¡Gracias!
ue hermoso poema, lo puse en mi muro, esto es grande «ientre varado a la orilla
de los manjares más caros».
Gracias por tu análisis. Me alegro que te haya gustado. Un saludo.